jueves, 24 de julio de 2008

ESCRITO EN LA ARENA

"Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio"

(Mario Benedetti)

CARACOLAS: YELLOW

EN LA ORILLA

Las cuenta como si fueran estrellas. Tal vez lo sean. Tal vez se hayan caído y busquen unas manos que las devuelvan al cielo. Lo cierto es que brillan y sus colores parecen jugar al escondite entre la espuma de las olas. Y él las cuenta, y no se atreve a cogerlas por si acaso esperan otro destino.



El mar, que le llama. Y el sol, que acaricia su espalda. Cuarenta. Cuarenta y uno. Cuarenta y dos. Tiene que concentrase para no perder la cuenta y tener que desandar lo andado. No le gusta mirar hacia atrás. Ni volver a caminar sobre sus pasos.

Cuarenta y tres. Cuarenta y cuatro. No sabría decir cual es la más hermosa. Si aquella con forma de abanico o la negra y rota. A él todas le parecen especiales. Y aunque alguna brilla más que otra, a lo lejos sólo se ve el caminito que van dejando al borde de la orilla.

Cuarenta y cinco. Cuarenta y seis. El firmamento a sus pies. Y cientos de galaxias por descubrir. Cuarenta y siete. Cuarenta y ocho. Cuarenta y nueve.