Su mirada oscura planea por su alma como una inmensa herida a punto de sangrar. La chica de la sonrísa contagiosa. Sin corazón, sin ojos, sin escudos. Ahora no es más que un soplo de viento a punto de extinguirse.
No puede evitarlo. Cada vez que intenta alejarse se amarra aún más fuerte a sus recuerdos. Un camino verde bañado de sueños. Un camino verde. Su camino. El de los dos. Ese al que nunca volvieron.
Y ahora no es más que un soplo de viento a punto de extinguirse. Porque él está lejos, muy lejos. Y cuando él se va, a ella no le queda nada. Más que el dolor y una enmarañada red de silencios.
viernes, 7 de diciembre de 2007
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3 comentarios:
Como dijo R. Tagore "Mejor una sonrisa triste a la tristeza de no poder sonreir"
O como dijo Machado "camiante no hay camino, se hace camno al andar y al echar la vista atrás, verás la senda que no has de volver a pisar".
Siempre adelante.
Como dijo R. Tagore "Mejor una sonrisa triste a la tristeza de no poder sonreir"
O como dijo Machado "camiante no hay camino, se hace camno al andar y al echar la vista atrás, verás la senda que no has de volver a pisar".
Siempre adelante.
Sí, sí, Estrigoiu, creo que me ha quedado claro, jeje...aunque veo que las cosas buenas hay que repetirlas, como las natillas. Of course.
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