"Hay quien muere de amor lentamente, y no lo sabe"
Delicioso y suave
cómo sonríe,
cómo los ojos abre preciso
¿Lo véis amigos? ¿No lo véis?
¿Más luminoso
cómo brilla, rodeado de estrellas
se eleva, ¿no lo veis?
¿Cómo su corazón late bravo, pleno y noble
se dilata en su pecho?
Cómo de sus labios, gozo delicioso,
un dulce aliento exhala ligero
¡Amigos! ¡Mirad!
¿No lo veis ni lo sentís?
¿Sólo yo oigo esta melodía,
que tan maravillosa, plena y suave,
lamentando gozosa, diciendo todo,
sosegando deliciosa,
resonando desde él ,
en mí penetra,
se eleva sobre sí, sonando precisa
me rodea?
Vibrando más claras
ondulándome,
¿Son olas de aires deliciosos?
¿Son nubes de aromas embriagadores?
Cómo crecen, me aturden,
¿debo respirar, debo escuchar?
¿Debo saborear, sumergirme?
¿En dulces fragancias respirarme?
En la masa ondulante, en el rumor resonante,
del Hálito del Mundo
en el Todo anhelante,
ahogarme,
hundirme,
inconsciente
¡Supremo placer!
lunes, 19 de noviembre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Quizá sea mejor eso, que no lo sepa. Morir de amor es muy bucólico, muy literario, pero muy malo para la salud. Sobre todo para la salud mental.
Besos.
Desde luego,Noe. Es mejor morir de viejo y con la cabeza bien amueblada. Sin duda.
Pasaba por aquí y entré un momento a saludarte y a decirte que yo también escucho esa melodía.
Vengo de enamorarte de las bellas enfermeras, tienen una sonrisa tan poética cuando te dicen: cariño te cambio las sabanitas…
Ya sabes…algunos poemas viven su propia vida.
Besito.
"enamorarme"-quise decir-
jaja..sin duda, Robin. Nunca sabes dónde vas a encontrar a tu "musa". Ah,ten cuidado con las poetisas.
Besos.
Publicar un comentario